Preaprobación
La preaprobación de un préstamo es cuando la financiera decide ofertarnos unas condiciones del crédito antes de la firma, basado en el estudio de nuestra solvencia.
La preaprobación de un préstamo es el resultado de un estudio del perfil del solicitante del mismo. Es decir, significa que, tras el análisis personalizado de la situación del solicitante del préstamo y antes de presentar la oferta vinculante, se preaprueba la solicitud por parte del banco.
No obstante, debemos siempre tener en cuenta que preaprobado no es lo mismo que aprobado. Existen razones o circunstancias por las que una institución financiera pueda rechazar nuestra solicitud en el momento de la concesión del préstamo. Algunas de ellas pueden ser:
Por otro lado, no tenemos obligación de firmar el préstamo preaprobado, ya que podemos encontrar otros préstamos con mejores condiciones en otras entidades financieras.
Por otro lado, existen los créditos preaprobados. Estos son ofrecidos por el banco por ser clientes del mismo. De esta manera, las entidades buscan fidelizar al cliente ofreciendo tasas de interés muy bajas. Obviamente, los bancos ya cuentan con nuestros datos y nuestro historial de pagos. Es por ello por lo que nos los pueden ofrecer y la aprobación final es más rápida de obtener.
A este tipo de créditos se les conoce también como créditos de consumo fácil. Reciben este nombre por la rapidez y facilidad con las que se les conceden a los clientes. Una vez solicitado, el banco pedirá algunos datos adicionales para conocer el riesgo del préstamo, pero obviarán otros que ya poseen. Las tasas de interés y las condiciones de estos créditos de consumo son diferentes dependiendo de la entidad.
Estos préstamos están destinados a necesidades personales. Por lo general, los solicitantes de estos créditos lo hacen para financiar compras de precios más elevados como pueden ser muebles, electrodomésticos, viajes, bodas, etc.
Por otro lado, es muy importante no confundir créditos de consumo fácil con préstamos sin garantía. Estos últimos suelen tener unos intereses muy bajos, pero es importante que leamos con atención las condiciones y la letra pequeña.
La preaprobación es un compromiso escrito de prestarte dinero a cambio de unas condiciones. Existe una vinculación y una obligación de prestar el dinero siempre y cuando se cumplan las condiciones en el momento de la concesión del préstamo. Como ya hemos visto, existen algunas circunstancias que puedan invalidar dicho contrato.
La precalificación, por otro lado, es una carta con información básica que le ofrecemos al prestamista para que pueda calcular la probabilidad de concedernos un préstamo. No obstante, estar esto no significa que la entidad financiera tenga la obligación de concedernos el préstamo.
La carta de precalificación explica que estamos en una posición financiera fuerte a la hora de hacer frente a una hipoteca. Esta carta se entregará a nuestro agente inmobiliario para poder ser considerados a la hora de comprar una vivienda. Aunque es importante que recordemos en todo momento que, aunque el banco nos haga una carta de precalificación, este no tiene ninguna obligación a concedernos el préstamo.