Activo Financiero
Se llaman activos financieros a las herramientas de inversión que generan beneficios al vendedor.
Un Activo Financiero es una herramienta de inversión a través de la cual podemos percibir ingresos que se generen por parte del vendedor. Los activos son normalmente vendidos por las empresas como «porciones» de su margen de beneficios, encontrando así una fuente de financiación a cambio de compartir sus futuros ingresos.
Un Activo Financiero es un título que compromete al vendedor del mismo a compartir una porción de sus futuros beneficios con el comprador. Por lo tanto, el comprador obtiene el derecho, mediante la compra del activo, de percibir dichos ingresos. Es por ello que la compra de un activo se considera una operación de inversión para el comprador, y una vía de financiación para el vendedor.
Los activos financieros se representan mediante títulos o anotaciones contables. La compraventa de un activo financiero se realiza en un mercado financiero en primera instancia, cuando la entidad que emite el activo busca vendedores. No obstante, existen los denominados mercados secundarios, en los que se realiza la compraventa de activos de manera indirecta. Es decir, no es la entidad que ha creado el activo quien la vende, si no inversores que la han comprado previamente.
Los activos financieros constan de tres características principales que se toman en cuenta a la hora de comprarlos:
En Top5Credits sabemos que la jerga económica puede ser confusa. Por ello creemos que la mejor manera de entender un término financiero, los cuales suelen ser bastante confusos, es mediante los ejemplos. Estos son unos cuantos ejemplos de activos financieros y cómo funcionan:
Aunque parezca complicado diferenciar entre Activo y Pasivo Financiero, la diferencia primordial es bastante simple. Y es que los Activos son claras herramientas de inversión. Es decir, cuando compramos un activo financiero, lo estamos haciendo con la intención de obtener un beneficio a través de dicha herramienta.
No obstante, un pasivo es cualquier bien que no genera ingresos, y comúnmente genera gastos. Por ejemplo, comprarnos un televisor es claramente un pasivo, ya que no nos va a generar un beneficio, si no más bien lo contrario.
No obstante, hay ciertos bienes en los que existe la duda. ¿Son activos o pasivos? Por ejemplo, comprar un coche puede suponer, y casi siempre supone, un gasto. Por lo tanto hablaríamos de un pasivo financiero. No obstante, puede que seamos taxistas, o que nuestro trabajo exija dicha movilidad; en este caso, podría convertirse en un activo.
La discrepancia más común es cuando hablamos de inmuebles. Comprar una casa para habitarla es claramente un pasivo, pero muchos inversores que se dedican a la inversión de bienes raíces los convierten en activos.