Muchas veces, los bancos y financieras suelen seguir anclados a un mundo que, poco a poco, está desapareciendo. En esta nueva realidad, especialmente tras la reciente crisis sanitaria, el antiguo orden económico está cambiando. La sociedad de nuestros padres, basada en estudiar una carrera y encontrar un empleo, parece estar acabándose. Cada vez es más común ser nuestro propio jefe y reinventarnos a cualquier edad. Por ello, cada vez son más las financieras que ofrecen préstamos sin nómina.
Préstamos sin nómina; ¿Son posibles?
La respuesta corta a esta pregunta es sencilla; sí, existen los préstamos sin nómina. No obstante, no hay que confundir que un préstamo sin nómina signifique un préstamo para personas sin ingresos. Este tipo de préstamos existen, pero están pensados para personas con fuentes de ingresos alternativas a un empleador, como pueden ser autónomos, empresarios o pensionistas.
Los autónomos suelen ser los primeros interesados, ya que es un sector de la población con poder adquisitivo pero cuya propia naturaleza de la actividad les impide poder presentar una nómina. Son quienes lo tendrán más fácil a la hora de obtener un crédito y quienes lo hacen más a menudo.
Respecto a los empresarios, suelen tener sus propias vías de financiación. Existen multitud de planes y bancos que ofrecen créditos a empresas, y generalmente son conocedores de los medios que poseen. No obstante, colectivos como los jubilados o parados son frecuentemente de los más interesados en préstamos sin nómina, pero lamentablemente los que menos opciones tienen.
Soy pensionista o parado. ¿Puedo pedir un préstamo?
La respuesta corta es sí; puedes pedir un préstamo si no tienes un empleo o actividad profesional. Pero, por supuesto, no será fácil y el requisito siempre será que tengas ingresos recurrentes.
Por ejemplo, puedes ser un pensionista con una buena pensión, ya sea sólo pública o combinada con algún plan de pensiones privado. Si la financiera decide que tus ingresos son suficientes, puedes optar al crédito. No obstante, si estamos parados, la cosa se complicará, ya que nuestros ingresos tienen fecha de caducidad y existe un límite por ley para la prestación por desempleo. Puede que alguna financiera de minicréditos te ofrezca un préstamo de una pequeña suma, pero si no tienes otros ingresos, será difícil.
Pero difícil no significa imposible. Puede que dispongamos de ingresos alternativos, como la reta de un inmueble, que puedan garantizar el pago de la cuota. Incluso algunos préstamos, los llamados préstamos con garantía, podrán otorgarnos un crédito si disponemos de alguna propiedad (comúnmente un coche o una vivienda) que avale el crédito. No obstante, recuerda que corres el riesgo de perder dicha propiedad, por lo que quizá en vez de un crédito, puedes plantear venderlo directamente.
Qué esperar de un préstamo sin nómina
No existen dos créditos iguales, ni dos clientes iguales. Por lo cual, no todos los préstamos sin nómina ofrecerán las mismas condiciones. Dependerá también del dinero que necesitemos y de la entidad, no sólo de nuestra situación. No obstante, puedes esperar lo siguiente:
- Mayores intereses. A no ser que seas un autónomo con buenos ingresos, los intereses de éstos créditos suelen ser mayores, ya que prestar dinero a alguien sin nómina suele ser una inversión de alto riesgo para la financiera.
- Importes menores. Si eres un pensionista o desempleado con un subsidio sobre los 1000€, pedir 100€ a pagar en un mes no es una idea descabellada. Pero si pides un préstamo de 60000€ con cuotas de 600€, será imposible que acepten tu crédito.
- Mayor documentación a presentar. Aunque algunas entidades tengan suficiente con verificar tu cuenta con Instantor, la mayoría querrán asegurarse de que posees ingresos, especialmente si pedimos una gran cantidad. Por ejemplo, los pagos de los inquilinos de la vivienda que alquilas, o pruebas de las propiedades que usarás como garantía.
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