Hay varias fechas ante las que nuestro bolsillo tiembla. La vuelta al cole, las navidades, cumpleaños de familiares y amigos… pero sin duda, la que más asusta a nuestras finanzas, es la famosa cuesta de Enero. Es en este periodo donde después de los excesos navideños (y sus consecuentes gastos) nos enfrentamos a una de las épocas del año más difíciles de superar en lo económico.
¿Qué es la cuesta de Enero?
La cuesta de enero toma el nombre de la metáfora en la cual, a nivel económico, el primer mes del año se nos hace cuesta arriba. Esto se debe a muchísimos factores, no hay una razón única que nos lleve a esta situación. Además, debemos saber que no es siempre nuestra culpa por gestionar mal nuestra economía, aunque muchas veces podríamos haber hecho una mejor gestión. Hay factores externos que hacen que la cuesta de Enero sea complicada para todos.
Estos son varias causas por las que la cuesta de Enero se nos hace tan difícil.
- Gastos previos. La cuesta de Enero sucede justo después de Navidad, uno de los meses con mayor gasto del año. A los regalos tenemos que sumarle diferentes cenas, fiestas de año nuevo, viajes, decoración…. es inevitable gastar poco en dichas fechas, por lo que nuestra economía ya entra en el nuevo año tocada.
- Inflación. No es un misterio que cada año todo cuesta más. Ya hemos oído, o incluso contado, esas historias de que con 500 pesetas ibas al cine, comías palomitas y tomabas una caña. Esto se debe a la inflación, un fenómeno que, de manera resumida, podemos decir que «encarece» nuestra vida (y en teoría debería aumentar nuestro salario). Aunque muchos productos se encarecen cada año progresivamente, muchos, como los que dependen de las autoridades (transporte público), fijan sus nuevas tarifas al inicio del año. Y no solo lo público: telefónicas y energéticas también suelen aumentar sus precios al inicio del año.
- Mala gestión financiera. Si bien hay factores que no podemos controlar, es muy común haber gestionado de mala manera nuestra economía en los meses anteriores. Por ejemplo, Diciembre suele tener dobles pagas, por lo que muchas veces nos confiamos y acabamos gastando más, consumiendo de manera irresponsable en rebajas anteriores como el Black Friday, comprando cosas que no necesitamos sin pensar en el duro mes que se nos viene.
Cómo superarla
Sobrevivir a la cuesta de Enero no es tan difícil como parece. Aunque la situación se complique, con una buena planificación podremos pasar el mes sin enterarnos de las dificultades económicas, e incluso ahorrar.
- Ahorra en Diciembre. Ya sabemos que las navidades salen caras. Pero normalmente tenemos herramientas que nos ayudarán. Por ejemplo, aprovechar el Black Friday para hacer las compras de navidad. También, si recibimos una doble paga, podremos superar la cuesta mejor gracias a su ayuda. Y si piensas viajar, te recomendamos que busques un destino barato, como puede ser Canarias.
- Ahorra en regalos, no en calidad. Muchas veces, al no saber qué regalar, creemos que lo más caro dará más calidad. A la hora de regalar tanto en Navidades como en Reyes, deberíamos invertir más en tiempo que en dinero. Por ejemplo, tu familiar puede que tenga una lista de deseos en Amazon donde puedas consultar qué le puede gustar, o podrías consultar sus redes sociales para encontrar ese artista que tanto le gusta. Solemos preferir los regalos más personales a los caros.
- Establece unas normas para Reyes y Papá Noel. La gran mayoría de países no regala nada en Reyes. Esto significa que no tiene por qué ser necesario regalar en dos ocasiones tan próximas. Si aun así eres muy tradicional, o tu familia no lo aceptaría, intenta imponer ciertas normas. Por ejemplo, Reyes puede ser el momento para los regalos más económicos, o viceversa; para muchos es más fácil asimilar los costes de los Reyes al ser más próximos a la fecha de ingreso de su nómina. Dependiendo de tu situación, valora marcar unas pautas que te permitan ahorrar y no tener dos fechas e las que tirar la casa por la ventana.
- Ahorra en fin de año. Esta es otra noche donde, sin gastar en regalos, podemos gastar mucho en otras cosas. Nunca deberías asumir un gasto que no puedes permitirte por compromisos sociales. ¿Vale la pena esa fiesta cuya entrada de 120€ incluye barra libre? 120€ son muchas copas, evidentemente más de lo recomendado. ¿Es tan importante no repetir vestido de fin de año? Los verdaderos amigos no deberían valorar tu aspecto, si no tu presencia. Y muchos opinan que las mejores fiestas de fin de año son aquellas en casa, rodeados de gente que realmente aprecias.
- Salda tus deudas. Como decimos, una doble paga en Navidades no tiene que significar gastársela en regalos y fiestas. Si arrastras deudas, aprovecha esa paga para liquidarlas, o un dinero extra para amortizar préstamos puede ser un regalo mejor que una nueva consola. Quizás no suena tan sentimental, pero agradecerás más llegar a fin de mes que gastar ese dinero extra en caprichos. Valora, si no dispones de ese extra, si te sale a cuenta reunificar tus deudas para empezar el año pagando mensualidades más bajas.
- Haz balance económico del año. ¿Pagar un párking y los impuestos de circulación por un vehículo que este año has usado menos de diez veces? ¿La subscripción a cierto servicio de streaming son 120€ al mes para disfrutar de unas pocas horas de cine o música a la semana? ¿No pisas ese gimnasio que te cuesta 30€ al mes? Haz balance del año anterior. Elimina mensualidades que no te compensen, y compara servicios como los telefónicos o energéticos para ver si sale a cuenta. Invertir tu tiempo para hacer cuentas te hará ahorrar dinero.
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