El mundo financiero, algunos dicen, se empeña en complicarse a sí mismo para que el cliente confundido ande a ciegas y a merced de los asesores financieros. Otros dirían que lo que más falta hace es educación financiera en las aulas, ya que ciertamente hablamos de conceptos que tienen su propia lógica, aunque a veces nos suenen a chino. Y es que diferenciar una línea de crédito de una tarjeta, aún hoy en día, no es algo conocido por todos.
Sea como sea, lo que es indudable es que necesitamos conocer qué tipo de productos existen y en qué se diferencian antes de contratar nada. Ya sabemos que la banca es muy agresiva en su publicidad, y suele intentar «colarnos» sus productos sin que sepamos qué alternativas existen. Y especialmente sucede cuando se nos ofrecen productos cuya similitud existe hasta en el nombre.
¿Qué es una Tarjeta de Crédito?
A pesar de lo que muchísima gente cree, una tarjeta de crédito no es la tarjeta con la que normalmente pagas tus compras. En realidad, la tarjeta más usada para comprar diariamente suele ser la Tarjeta de Débito, que es la tarjeta que, al usarla en un comercio físico u online, descuenta una cantidad de nuestra cuenta bancaria. En cambio, la tarjeta de crédito, no descuenta el dinero de nuestra cuenta, si no que nos añade una deuda para con nuestro banco. Así pues, hay que entender que la Tarjeta de Crédito es un tipo de préstamo. Cabe recordar que existen Tarjetas de Crédito y Débito a la vez, y que hoy en día la mayoría de Tarjetas de Crédito permiten también retirar dinero en cajeros de diferentes cuentas a nuestro nombre.
Por supuesto, estas tarjetas, que no son más que préstamos preconcedidos hasta un tope mensual previamente acordado, son mucho más sencillas, cómodas y flexibles que pedir un crédito mensualmente. Además, las Tarjetas Oro como la de Wizink se basan en la confianza en el cliente, por lo que generalmente no generan comisiones por el préstamo en sí, ya que si la deuda es liquidada al mas siguiente no suele costarnos nada, aplicando comisiones elevadas pero sólo cuando decidamos aplazar a más de un mes dicha compra, o bien dichas tarjetas tienen un precio fijo anual.
¿Qué es una Línea de Crédito?
Una explicación rápida, pero incorrecta, sería decir que una Línea de Crédito es igual que una Tarjeta de Crédito pero sin el elemento físico de la tarjeta en sí. Uno pensaría pues qué sentido tiene tener una Línea de Crédito pudiendo tener una tarjeta, pero esto cobra más sentido cuando entendemos que las Líneas de Crédito son predecesoras de las Tarjetas, y que no suelen tener al particular como cliente.
Esto hace que las Líneas de Crédito, otorgadas mayoritariamente a Estados y Empresas, tengan límites mucho más altos y flexibles, personalizan más sus opciones respecto a sus clientes. Además, estos no usan dichas líneas para afrontar pequeños gastos como posponer para el mes que viene la compra de esa chaqueta tan chula que no puede esperar, si no para realizar grandes desembolsos como pagos de nóminas, a proveedores o facturas.
No obstante, esta modalidad cada vez se abre más al público minorista, con empresas como Ferratum ofreciendo Líneas de Crédito a particulares que desean tener ese préstamo preconcebido sin cambiar de banco.
Decidir cuál te conviene más
Generalmente, los particulares solemos estar más interesados en las Tarjetas de Crédito. No solemos necesitar límites muy elevados, y simplemente es cómodo poder disponer de un crédito para imprevistos o pequeñas compras que no pueden esperar. Por supuesto, siempre hay que ser responsable y la cara oculta de las tarjetas es que puedes acabar usándolas como hábito, haciéndote vivir en la eterna deuda, cosa poco recomendable. Así que si eres de los que una tarjeta le quema en las manos, deberías pasarte a la Línea de Crédito.
No obstante, si eres empresario, autónomo o alguien que maneja cantidades de dinero importantes y cuyo destino no son compras, si no otro tipo de pagos, la Línea de Crédito es tu producto. Y no solo hablamos de gente que maneje grandes cantidades de dinero, si no pueden ser artistas, trabajadores de temporada o cualquier persona que necesite realizar ciertos ingresos y deba adelantarlos de manera común.
En cualquiera de los casos, siempre hay tener claro que crédito significa préstamo, por lo que ya sea una Tarjeta de Crédito para nuestras compras o una Línea de Crédito para nuestros pagos, siempre estamos contratando un préstamo, y de no ser pagados, generarán deudas.
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