A veces pensamos que ahorrar es pan comido. Simplemente vamos al súper y compramos todo en marca blanca, tiramos de la ropa que tenemos hasta que realmente sea necesario un cambio de armario, consumimos los productos más baratos y nos quitamos de lujos. Pero la realidad es que el grueso de nuestros gastos mensuales viene definido por las facturas de los servicios que pagamos. Pero, ¿Cómo ahorrar en tus facturas?
Si bien ya os hemos dado ciertos trucos para ahorrar, algunos más generales y otros enfocados a situaciones específicas como al comprar tu coche, viajar u organizar tu boda, puede que lleves contigo una loza de gastos mensuales. No te preocupes, ya que te damos las claves para ahorrar con tus facturas.
Ahorrar restando cuotas prescindibles
No podemos vivir sin agua, luz y conectarnos con los demás. Aunque si somos un poco ermitaños podemos renunciar a ésto último, es poco probable que querramos renunciar a nuestro servicio de teléfono e internet. Pero muchas veces acabamos pagando mensualidades sin necesitarlas. Estos son varios ejemplos:
- Gimnasio. Estar en forma, coincidimos, es una necesidad. Pero muchas veces acabamos pagando sin poner un pie en el gimnasio. Creemos que la cuota nos forzará, pero muchas veces no es así. En este caso, es mejor cancelar la membresía si no tenemos tiempo o ganas, o bien cambiarlo por una actividad que de verdad nos guste, como el baile, artes marciales o fútbol. Recuerda también que salir a correr siempre será gratis.
- Servicios de Streaming. Aunque lo parezca, no siempre es necesario tener Netflix o Spotify. Nos hemos aficionado a estos servicios casi por obligación. Piensa que, por ejemplo, Amazon Prime ofrece servicio de Streaming más barato que también te ayudará a ahorrar gastos de envío, y que Spotify tiene su vertiente gratis. Además, valora cuánto consumes este tipo de servicios, ya que puede que comprarte un DVD o un CD de vez en cuando sea más económico, por anticuado que parezca (llámalo vintage).
- ONGs. Ayudar a los desfavorecidos está bien, pero no a coste de que tengamos que ser nosotros los que tengamos que acudir a sus servicios. Si tu economía está renqueante, no tengas miedo ni pudor a cancelar tus membresías.
- Otras suscripciones. Muchas veces mantenemos ciertas suscripciones por inercia. Esta revista que pagamos desde la adolescencia, la televisión por cable… son pequeños gastos que se van acumulando. Haz ejercicio de memoria y cancela los que no te interesen, por poco que cuesten.
- Tarjetas de Crédito. Tener una tarjeta de crédito no significa usarla. Nunca aplaces pagos si no es necesario, y siempre, verifica que tienes una buena tarjeta de crédito que no te cargue comisiones en exceso.
Ahorrar en tus facturas de electricidad
La luz es la factura que más tenemos, ya que la factura de la electricidad puede llegar a ser una barbaridad, ya que somos el quinto país con la electricidad más cara de Europa. Aunque no podamos bajar los precios, te damos unos trucos:
- Valora calefacción alternativa a la eléctrica. Evita luces halógenas de precios baratos pero consumo alto. Si eres propietario, valora instalar un sistema integral, ya que la inversión valdrá la pena.
- Ventilador antes de aire acondicionado. El ahorro eléctrico ronda el 90% si usamos ventiladores, claro que dependerá de dónde vivamos si es necesario o no.
- Apaga lo que no uses. Suena lógico, pero, ¿Cuántas veces nos dormimos con la TV puesta, la calefacción o dejamos el PC encendido descargando algo? Aunque son gastos pequeños, suman.
- Ajusta tu tarifa. Muchas, por no decir la mayoría de las eléctricas, nos dan un suministro que no necesitamos. Calcula cuánto gastas y ajusta tu tarifa a dicho gasto, o bien contrata alguna con descuento en las franjas horarias donde te encuentres.
- Controla en contador. Hay cosas poco más desagradables que encontrarnos una factura de más de tres dígitos tras la revisión del contador. Mantenlo siempre al día, ya que estos cargos tan grandes pueden destrozar nuestra economía mensual.
Ahorrar en tus facturas de agua
Aunque no tan temible como la eléctrica, la factura de agua puede también darnos algún susto. Toma estos consejos:
- Dúchate en el gimnasio. Si eres de los que sí va al gimnasio, aparca el pudor y usa las duchas. Ahorrarás significativamente.
- Cierra los grifos. Aunque parezca obvio, pequeños gestos como cerrar el grifo al lavarnos los dientes o enjabonar primero y aclarar después al lavar los platos, son garantía de ahorro.
- Ducha en vez de baño. Intenta evitar el capricho de llenar la bañera al llegar de trabajar. El gasto de agua es considerable.
- Siempre a carga completa. Llena tu lavavajillas y lavadora antes de usarlos, ya que éste es el principal consumo de agua de nuestros hogares.
Ahorrar en las facturas telefónicas
Otro gasto fijo es la telefonía e internet, servicios difíciles de renunciar. Siendo también de los más caros de Europa, ciertos trucos te ayudarán.
- Contrata lo que gastas. Si no llegas a los 200gb mensuales, o tu uso de internet es sólo para visitar páginas, no necesitas tarifas con muchos números (incluidos los de la factura). Puedes monitorizar tu gasto en cualquier móvil, y si no juegas en línea ni descargas archivo grandes, tu PC no necesita la conexión más rápido.
- Agiliza tu conexión sin pagar más. Muchas veces internet va lento y queremos arreglarlo a golpe de talonario. Revisa que tu ordenador o terminal móvil esté libre de virus y troyanos, o que cierras las aplicaciones que más datos consumen. En caso del ordenador, prueba a usar un cable ethernet en lugar del WiFi.
- El ADSL no es obligatorio. Si no usas ordenador habitualmente, es poco probable que necesites internet en casa, ya que puedes compartir tu conexión de datos del móvil en casos puntuales. Así puedes ahorrarte también la línea telefónica fija, que suele venir con el pack.
- ¿Llamadas o WhatsApp?. Si no sueles necesitar llamar por teléfono, no suele salir rentable tener contratos que te regalen minutos. El 4g y el 5g hacen que las llamadas por WhatsApp hoy en día sean prácticamente igual de fluidas.
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